martes, 4 de abril de 2017

Misa: lugar de celebración de la...

Misa: lugar de celebración de la...





Misa: lugar de celebración de la...

- ¿Se puede celebrar la Eucaristía fuera de la Iglesia?
Hay distintas ocasiones en las que las circunstancias impiden celebrar la celebración de la Eucaristía en en templo.
Lo
ideal es celebrar siempre la Misa en un lugar sagrado: iglesia, ermita,
oratorio... pero en caso de necesidad se puede autorizar su celebración
en otros lugares, teniendo siempre en cuenta las orientaciones de la
Iglesia.

Sobre el lugar de la celebración de la Eucaristía el Código de Derecho Canónico dice:

932
§ 1. La celebración eucarística se ha de hacer en lugar sagrado, a
no ser que, en un caso particular, la necesidad exija otra cosa; en este
caso, la celebración debe realizarse en un lugar digno.

§ 2.
Se debe celebrar el Sacrificio eucarístico en un altar dedicado o
bendecido; fuera del lugar sagrado se puede emplear una mesa apropiada,
utilizando siempre el mantel y el corporal.

En la Instrucción REDEMPTIONIS SACRAMENTUM dice:

[108.]
«La celebración eucarística se ha de hacer en lugar sagrado, a no ser
que, en un caso particular, la necesidad exija otra cosa; en este caso,
la celebración debe realizarse en un lugar digno». De la necesidad del
caso juzgará, habitualmente, el Obispo diocesano para su diócesis.

[109.] Nunca es lícito a un sacerdote celebrar la Eucaristía en un templo o lugar sagrado de cualquier religión no cristiana.

¿Puede y es lícito celebrarse la Misa fuera de un templo, al aire libre, en un edificio o en un domicilio particular?
La respuesta es sí, pero con unos requisitos que ahora analizamos.

El
sacrificio del Señor se ofrece, como norma general, en un lugar
sagrado, entendiéndose por tal un templo debidamente consagrado. Ahora
bien, por justa causa o necesidad se puede celebrar en otro lugar, que
debe ser adecuado (por ejemplo un cementerio al aire libre o las
llamadas misas de campaña). Vemos ahora qué significa adecuado y qué
requisitos requiere la celebración fuera de un templo.

La Misa se
celebra normalmente en un altar que ha debido ser dedicado o bendecido;
fuera de un lugar sagrado puede celebrarse en una mesa apropiada pero
siempre con ornamentos de altar (mantel) y con corporal.
Por tanto,
para no perder el significado de la celebración eucarística, el
celebrante debe asegurarse de que se cumplen todos los requisitos
necesarios para oficiar la Misa fuera del lugar sagrado: deberá
determinar en primer lugar si es realmente necesario usar ese lugar como
lugar sagrado. Si hubiese una iglesia o capilla cercana nada puede
justificar el uso de otros lugares (una clase, sala de conferencias,
auditorio y similares).

Una vez decidido que el lugar es adecuado
para la celebración de la Eucaristía debe tener muy en cuenta que no
deben utilizarse para la celebración comedores y mesas en los que de
ordinario se coma, dejando esta posibilidad como la última de las
existentes. Una mesa «apropiada» deberá ser una que tenga una superficie
lo suficientemente amplia para contener los vasos sagrados, misal, cruz
y velas; que sea lo suficientemente alta para que el sacerdote pueda
estar de pie delante de ella durante la celebración (por tanto, una
mesilla o similar no es apropiada); estar limpia y que no se relacione
con usos que puedan inducir a escándalo o al ridículo. Se pondrá una
sede digna para el celebrante cerca del altar y en la medida de lo
posible se empleará un atril portátil. Si la ocasión es solemne debe
cubrirse el altar con un dosel a modo de techo.

Los requisitos
básicos para la Misa son: lienzos dignos para el altar, vasos para el
vino y el agua, un cuenco para lavar las manos del sacerdote, una toalla
de mano y en o cerca del altar, un crucifijo y velas. Por lo general,
el sacerdote aportará el pan y el vino, cáliz, patena, corporal,
purificador y los ornamentos: alba, estola y casulla, misal y
leccionario.

Donde el Ordinario lo permita y con el permiso del
párroco, la Misa podrá celebrarse en un domicilio particular. Durante
una Misa doméstica (generalmente por causa de enfermedad grave de algún
residente) deberán ayudar como lectores y ayudantes algunos de los
miembros de la familia. Se exhortará a todos los familiares a preparar
las mejores ropas, vasos, etc., para el honor de Dios. Pueden, de
acuerdo con sus recursos, colocar flores frescas en o cerca del altar y
si es costumbre también se puede colocar en el altar una imagen sagrada a
la que tengan gran devoción.

Cuando la Misa se celebra al aire
libre se deben tomar precauciones razonables para evitar los efectos del
polvo, el viento o el clima, colocando pesos en los lienzos del altar o
cubriendo el cáliz con un paño adecuado. La patena deberá tener una
cubierta y se permite colocar un disco metálico sobre la Hostia durante
la celebración para evitar que vuele. Asimismo el copón deberá tener una
cubierta segura o bien podrá taparse con una cubierta plana durante la
distribución de la Comunión. Por último es de sentido común poner
cristales protectores en los cirios y proteger los micrófonos contra los
efectos del viento.

Vea también:
- Boda me puedo casar en la playa, el campo...



(c)2016 DIÓCESIS DE CANARIAS - Islas Canarias - España -
www.diocesisdecanarias.es - www.diocesis.tel Quedan todos los derechos
reservados IMPORTANTE: Toda la información que ofrecemos tiene
únicamente validez informativa general y en ningún caso es vinculante o
aplicable a situaciones concretas donde sólo el párroco o el responsable
eclesiástico correspondiente tiene la capacidad de resolver. La
Diócesis de Canarias y cualquiera de sus organismos no se
responsabilizan de la interpretación, aplicación, daños a terceros de
cualquier tipo, daños materiales, ni de ningún otro tipo que se puedan
derivar de las respuestas a las cuestiones que tratamos. Son las
correspondientes autoridades eclesiástica quienes tienen que decidir en
cada caso que es lo que conviene y cómo se debe aplicar la actual
normativa de la Iglesia. La información que facilitamos es con buena fe y
gratuita y tratamos que sea actualizada, aunque no siempre puede ser
así. Ante cualquier duda en el texto póngase en contacto con su párroco.

Imprimir esta página


No hay comentarios:

Publicar un comentario